Hoy es el día en el que aprenderás cómo el cáncer de próstata puede llegar a afectar a todo el suelo pélvico. Y lo más importante, de qué forma se puede recuperar el suelo pélvico.
¿CÓMO ES EL CÁNCER DE PRÓSTATA?
Antes que nada… ¿Qué es la próstata? Hablamos de una glándula del aparato reproductor masculino cuya finalidad principal es la fabricación y liberación del líquido prostático. La próstata se encuentra situada debajo de la vejiga y frente al recto.
¿Sabías que el cáncer de próstata es el más común entre los hombres? En parte se debe a que es difícil detectarlo con antelación, porque en sus primeras fases no se suelen mostrar síntomas. Este cáncer consiste en el crecimiento incontrolado de células en la glándula prostática, lo que puede llegar a inflamar toda la zona pélvica del hombre. Y cómo te puedes imaginar, el cáncer de próstata se puede extender y producir nuevos tumores en otros tejidos del cuerpo.
¿Se puede tratar el cáncer de próstata? La verdad es que sí. Depende del diagnóstico de cada paciente, este se puede someter a tratamiento hormonal, radioterapia externa o interna, quimioterapia o a cirugía (con extirpación total o parcial). Pero el caso es que todas estas medidas suelen traer efectos secundarios.
¿QUÉ CONSECUENCIAS TIENE EL CÁNCER DE PRÓSTATA SOBRE EL SUELO PÉLVICO?
Algunos de los efectos negativos que deja el cáncer de próstata en relación al suelo pélvico son:
- Urgencia miccional: esa sensación que aparece de forma repentina de tener que orinar urgentemente, combinado con la sensación de que no te puedes aguantar.
- Goteo miccional: se trata de cuando se escapan gotas de orina a pesar de haber ido ya al baño y de haberte dado la sensación de que has vaciado toda la vejiga.
- Incontinencia urinaria: cuando se pierde el control sobre la vejiga.
- Eyaculación retrógrada: se refiere al momento en el que, al tener un orgasmo, el esperma se introduce en la vejiga en lugar de salir al exterior a través del pene.
¿CÓMO SE PUEDE ACABAR CON ESTAS DISFUNCIONES DEL SUELO PÉLVICO?
Una de las respuestas se encuentra en la fisioterapia especializada en el suelo pélvico. Para ello, es adecuado seguir una serie de pasos:
En primer lugar, los profesionales deben realizar una valoración completa de la situación. Se estudian los síntomas, la postura, las cicatrices tras la operación (si es el caso) y el estado físico del suelo pélvico. Esto ayudará a hacer nuestro plan de recuperación.
Después, es necesario crear un calendario miccional. Esto es un registro de todo lo que ocurre y cuándo (teniendo en cuenta incluso la hora exacta) ocurre: el número de micciones diarias, de las pérdidas de orina, de absorbentes usados…
En tercer lugar, se trata de reeducar la ingesta hídrica, es decir se reestablecen las pautas sobre qué beber y cuándo.
Acto seguido, se procede al tratamiento de las cicatrices (si es que es el caso). Con ello se evita la adherencia de los tejidos abomino-pélvicos.
Por último, pero no menos importante, se da paso a los ejercicios de recuperación. Este es el período más largo de la rehabilitación. Hay que tener en cuenta que no todos los casos son iguales, por lo que no todo el mundo debe realizar los mismos ejercicios. Es importante que estos ejercicios se tomen de forma personalizada. También es importante que el paciente cuente con la disciplina y la constancia necesaria.
Gracias a las revisiones periódicas y al estudio de cómo progresa el calendario miccional, se podrán comprobar fácilmente los avances del paciente. Depende de muchos factores, pero realmente es posible encontrar grandes mejoras a corto plazo.
Consulta este otro artículo si quieres aprender más sobre el suelo pélvico masculino. Y no dudes en contactar con Clínica Vegasalud si necesitas más información o tomar un tratamiento de suelo pélvico en Almería.
